MUNICIPIO ESPECIAL: LA ISLA DE LA JUVENTUD
La Isla de la Juventud, situada a 100 km del litoral sur de la isla principal de Cuba, es la segunda en extensión dentro del archipiélago cubano. El transporte aéreo y marítimo son las únicas vías de acceso a sus bellos parajes, contando el último con especial aceptación, ya que permite atravesar las apacibles y transparentes aguas del Golfo de Batabanó.


Su renglón económico fundamental es la
pesca comercial, centrada en especies como la cherna, la langosta y la tortuga. No obstante, desde el triunfo revolucionario de 1959 el gobierno nacional se interesó en desarrollar la agricultura en la región, a través del adecuado aprovechamiento de tierras en desuso. El
cultivo de cítricos devino así en una de las actividades fundamentales de su sustento, con una ingente producción que rivaliza con las zonas de mayor tradición agropecuaria del país.
Son muchos los nombres que ha recibido esta isla tras ser
descubierta por Colón en 1494, en un fallido intento de apresar con la toponimia las singularidades de la evolución socio-histórica y natural del territorio. Quizás el más conocido, por la promesa de excitante misterio que implica, es el de
«Isla de los Piratas».

Durante cuatro siglos, esta zona fue refugio de piratas y contrabandistas, quienes encontraban en sus desoladas costas un clemente abrigo. Incluso, muchos estudiosos y entusiastas de la piratería consideran que sirvió de inspiración al escritor
Robert Louis Stevenson para escribir su más célebre obra:
La Isla del Tesoro. Aún hoy se pueden encontrar aventureros merodeando por su litoral, bajo la ingrata expectativa de encontrar el olvidado tesoro de algún afamado pirata.
Cayo Largo del Sur
La principal plaza turística de la Isla de la Juventud es
Cayo Largo del Sur, un islote de origen coralino situado en el extremo oriental del
Archipiélago de Los Canarreos. Sus privilegiados entornos naturales, intactos ante el pernicioso avance de la industria hotelera, lo han convertido en uno de los destinos más visitados y celebrados del país.
Más de
25 km de sus costas se encuentran plagados de paradisíacas playas, notorias por sus extensas franjas de arena blanca y el azul penetrante de sus aguas.
En
sus fondos marinos, clasificados por los especialistas como uno de
los más bellos del país, se logra una comunión de elementos sin igual en la geografía cubana: extensas barreras coralinas pobladas por una abundante fauna marina, complementadas con la exótica presencia de varios galeones hundidos.
En resumen, la Isla de la Juventud aglutina varios de los paisajes costeros más contemplativos de Cuba, surcados de intrigantes leyendas y vanas aspiraciones.
Cayo Largo del Sur, es un privilegio de la geografía cubana en medio del Mar Caribe.
Este cayo de origen coralino, con una superficie territorial de
37,5 km2, constituye uno de los destinos turísticos más visitados de la región. Esa imagen paradisíaca del Caribe, con islas llenas de cocoteros, playas de finas arenas blancas y aguas de un penetrante azul, encuentra su reflejo más aproximado en el ambiente idílico que ofrece este lugar.
De todos los cayos de Cuba utilizados con propósitos turísticos, este es uno de los que mejor ha evitado la fricción perniciosa de la infraestructura hotelera, por lo que su naturaleza muestra un elevado grado de conservación. En él, y en los cayos vecinos que lo complementan, se desarrollan numerosas especies de la flora y la fauna, para las que existe un competente programa de protección.

Entre sus numerosos atractivos se encuentra la
Granja de las Tortugas, un pequeño complejo al noreste de la isla que, desde mayo a septiembre, organiza excursiones para avistar tortugas durante la noche. Sus fondos marinos, unos de los más hermosos del país según los conocedores, permiten a los amantes del buceo pasearse entre galeones hundidos, bellos arrecifes coralinos y una abundante fauna marina. Esta actividad se realiza en la plataforma circundante al cayo, que cuenta con una extensión de
30 millas.Por último, es imprescindible hablar de sus
25 km de hermosas playas, que en esa conjunción maravillosa de clima cálido y refrescantes aguas, absorben por completo la atención de los turistas.
Entre ellas la más conocida es
Playa Sirena, para muchos la mejor playa de toda Cuba.